viernes, 3 de octubre de 2014

Samanda y el diente de oro



Era un lunes, un lunes de marzo.


A Samanda, en la cena se le cayó el diente que la habían empastado que era de un color oro. Lo puso debajo de la almohada y cuando vino el ratón Pérez dijo susurrando a él mismo:

-¡Qué bonito! ¡es precioso!.


Al día siguiente, Samanda se encontró 1 €, otro y otro, los contó y eran 3 €; se compró una chuche y un nenuco.


Alicia Montes de Oca
Junio 2014

1 comentario:

  1. Resulto que tenia muchas chuches y muchos nenucos se dio cuenta pero ya lo abia pagado

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