domingo, 1 de noviembre de 2015

Un día de aventuras


Un día mis padres se animaron a ir en bici hasta el final del pueblo y preguntamos a mis primos si querían venir. Lo que más me gustó de ese día fue comenzar de nuevo andar en bici después de tantos días sin cogerla.



Un poblado indio en Arija

 Estaba yo con mis primos Nico y Mateo en Arija; nos estábamos aburriendo mucho cuando se nos ocurrió una idea, hacer un poblado indio y luego hacer una función a la familia pidiendo dinero para luego ir a comprar chuches.  Lo hicimos con palos, cuerda y telas.
Hicimos tres tiendas de campaña, un fuego de mentiras en el que pusimos avellanas como que las íbamos a comer y un asador para asar la carne. Nuestros familiares no nos dejaron un chorizo y una morcilla para asar de mentira y entonces Dorita, la abuela de mis primos nos dijo que cogiéramos palo y cuerda para imitar al chorizo y a la morcilla.
Al terminar estuvimos muy orgullosos de nuestro trabajo porque habíamos congeniado muy bien a la hora de trabajar.